Tarde o temprano llegan los cambios de armario y una de las frases que más escucho en tienda, tengo ropa, mucha, pero esa ya no me la pongo.
En este post voy a intentar ayudarte a solucionar este problema, con 5 tips muy sencillos, podrás volver a disfrutar de tu armario y de la ropa.
1. Lo primero vacía el armario.
Entero. Que no queden ni las perchas. Este es un buen momento para cambiar las que están a punto de romperse (por sobrepeso o porque es mala), una percha pachucha puede romperse y dañarte la prenda.
2. Lo que no uses, al trastero.
Estos cambios sirven para hacer una selección de las prendas que ya no nos ponemos. Según un estudio, ojo al dato, tardamos de media 3 años en sacar del armario una prenda que no usamos. ¡3 años! Te digo al trastero, por si la tienes cariño o yo que sé, pero también la puedes donar, reutilizar o reciclar (clásico pa’ trapos), pero si la ves muy mal, tírala directamente.
3. Agrupa las prendas
Según las vayas sacando, agrúpalas por categorías. Primero por temporada, porque si estas en verano, el jersey de cuello vuelto sobra. Obio. (Pal´ trastero)
Después puedes hacerlo por camisetas, camisas, etc o por looks. Esta última forma es un poco más compleja de organizar ya que puedes tener muchas variantes y tardarás un poco más, pero ahorrarás tiempo en tu día a día ya que el conjunto le tienes hecho 😉
4. Apura los cajones
Dobla en vertical. El doblado clásico viene muy bien para las baldas, pero no así para los cajones. haz un doblado vertical para apurar al máximo el espacio.
5. ¿Y con esta que hago?
Seguro que te encontrarás con el dilema de qué hacer con una prenda que o bien está algo vieja o hace 1000 años que no te la pones, pero que te encanta, la adoras o te recuerda a alguien y no quieres ni tirarla, ni donarla…
Opción A: guárdala en el trastero.
Opción B: reutilízala y crea otra cosa con ella
Opción C: créale un altar (vale, no es una opción muy “normal”, pero en el trastero ya no tenía sitio 😅)
